Extraño...nuestra obscenidad ingenua. Las cosas qué hacíamos, del modo en que jugábamos, cosas que tienen el mismo valor que cuando uno era muy chico y probaba cosas. Son cosas que no se repiten. Y son cosas que surgen propias de la confianza e interés por el otro. Cosas que me pueden surgir con otra mujer, pero se dan de otro modo, no por ello malas, pero son de otro modo.
Las últimas veces que estuvimos fueron muy superficiales, aún así las disfruté del mismo modo. Aún con los altibajos que existieron tengo un grato recuerdo de cómo NOS MATÁBAMOS.
De las cosas que me gustaba hacerte, de las cosas que me gustaba que hicieras.
Por más que quiera, no puedo hacer desaparecer eso de mi cabeza.
Y el cuerpo pide!
Moncholo
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ME SIGO PORTANDO BIEN CON VOS O YA LA PUEDO EMPEZAR A CAGAR?
viernes, 5 de noviembre de 2010
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